En pantalla: Zack Snyder’s Justice League

Título Original: Zack Snyder’s Justice League
Dirección: Zack Snyder
Guion: Chris Terrio; de una historia de Zack Snyder, Will Beall, y Chris Terrio
Elenco: Ben Affleck, Gal Gadot, Jason Momoa, Ray Fisher, Ezra Miller, Henry Cavill, Jeremy Irons, Ciarán Hinds.
Duración: 242 minutos



No mentiré: soy de los que siempre creyeron que esta versión de la película era un invento de los fans de Zack Snyder, y llegué a decir que “sería la Dune de Jodorowski del siglo XXI”. Debo partir diciendo que me equivoqué, y estoy feliz hasta cierto punto de haberlo hecho, ya que la película que tenemos aquí es una versión bastante mejor que la estrenada en 2017, aunque tampoco es una obra maestra.

La trama básica de la película es la misma que ya vimos: Tras la muerte de Superman, Bruce Wayne y Diana Prince comienzan a preparar un equipo de los mejores guerreros del planeta para hacer frente a la amenaza de Steppenwolf, quien busca reunir las tres Cajas Madre y redimirse ante su maestro, Darkseid.

Entonces, iré directo al grano. Quiero juzgar la película bajo sus propios méritos, y debo decir que se nota que Snyder aprendió de “Batman v. Superman”, ya que aquí todo se toma su tiempo, y no tenemos escenas aceleradas o momentos en los que parece que nos perdimos de algo, o dónde tenemos varias películas comprimidas en una. Sí hay indicaciones de lo que vendrá en el futuro, pero claramente no lo tenemos en la cara constantemente. 

Sí sentí que la película tiene algunos problemas, ya que la música es bastante buena, pero hay veces que exagera la emoción que las escenas buscan transmitirnos en lugar de complementarlas, y pasa lo mismo con las escenas dónde se usan canciones licenciadas, y esto a pesar de que me gustan la mayoría de las canciones que usaron.

Otro problema es que cae en algunos clichés del género, siendo el más grande la “toma del equipo”, dónde todos los héroes aparecen posando, o en pose de combate. Y además, lo que mencionaba de la música pasa un par de veces con el simbolismo religioso o con las meditaciones sobre la humanidad o la responsabilidad que dan los poderes, para lo cual Snyder tiene la sutileza de un martillo de demolición. Estuve cerca de parar la película tres veces por esto, pero ahí es donde las fortalezas de esta versión comienzan a aflorar.

El ritmo es bastante mejor, ya que es lento, pero absolutamente constante. Nada está acelerado, y las escenas tienen una duración bastante más natural. El tono oscuro, que también se refleja en la paleta de colores, también se mantiene, y solo se desentona en un par de escenas, especialmente cuando Flash está en pantalla, aunque tampoco es algo que desentone tanto como en la versión de Joss Whedon. 

 

 

Tendremos más presencia de personajes secundarios, y por fin podremos ver a Cyborg en pantalla. Su historia y desarrollo fue cortada dramáticamente en la primera versión, y esta cinta lo deja claro, porque veremos su origen, su trasfondo, y las relaciones que forma con otros personajes, sin estar solo para hacer chistes malos.

Los efectos especiales son bastante buenos, y Steppenwolf se ve bastante más amenazante que antes, además de que ya no tendremos la infame cara retocada de Henry Cavill. La acción es entretenida de ver y no abusa de los cortes rápidos, y me sorprendió ver la cantidad de sangre y contenido gráfico en algunos momentos. Siento que el tono estaba a medio camino entre PG-13 (calificación para mayores de 13 años, para la que se suelen hacer gran parte de las películas hoy en día) y R (mayores de 17 años). No sé si el éxito de “Joker” haya tenido que ver en esto, pero creo que vale la pena mencionarlo, incluso si el lenguaje es más para la primera categoría.

Ahora, no todo es color de rosa. Como dije antes, Snyder no sabe ser sutil, y se nota, porque esta cinta tiene su estilo por todas partes, con el estilo de cámara, personajes, música, e incluso creo haber visto una referencia a “Watchmen” por ahí. Los fanáticos del director estarán más que felices, pero esto también puede alejar a quienes no son fanáticos de él. 

También, esta película claramente no es “imposible de ver” cómo se rumora que dijeron ejecutivos de DC, pero sí da para pensar qué tanto habría variado la cinta si se hubiera estrenado en dos partes como estaba planeado originalmente. Un estreno mediante streaming permite que la gente vea la cinta a otro ritmo, ya que estrenarla en dos partes (que de seguro habrían tenido un año de distancia) habría causado que se sintiera incompleta y generado pésimas críticas.

Sin embargo, este formato permitirá que la gente disfrute la película al ritmo que quiera, lo cual ayuda bastante a disfrutarla más. Solo me extraña la relación de aspecto con la que se ha estrenado, ya que es muy cuadrado, y muchos estamos acostumbrados a una imagen más rectangular, pero esto sería por el gusto de Snyder de usar IMAX, que permite esto.

En resumen, no es una obra maestra, pero demuestra que Snyder sí tenía una visión clara de lo que quería hacer, y su película fue mutilada por Joss Whedon y los ejecutivos de Warner. La cinta es sorprendentemente consistente, y mantiene esta consistencia por 4 horas, lo que de por sí es digno de mención, además de mostrar que el DCEU siempre tuvo un plan a largo plazo.


Escrito por Mario