El Proyecto Joshua

Título: El Proyecto Joshua

Autor: Sebastian Fitzek  

Editorial: Ediciones B

Páginas: 384 pág.

Sinopsis:

Max, un autor fracasado, es un ciudadano respetuoso de las leyes.

A diferencia de su hermano Cosmo, encerrado en las celdas de seguridad de una clínica psiquiátrica, Max nunca ha cometido ningún error.

Sin embargo, dentro de pocos días consumará uno de los delitos más horrorosos de que es capaz un ser humano.

Solo que, por el momento, lo ignora…

Pero hay quienes sí lo saben, y están decididos a matarlo antes de que sea demasiado tarde. 

Opinión Personal:

Hola, hoy les mencionaré sobre un libro que me sorprendió bastante. Anteriormente había escuchado hablar del autor, pero es en esta novela en la que tuve la oportunidad de conocerlo. Gracias a Ediciones B por facilitar el bonito ejemplar. 

Es imposible no hacer spoilers de la trama, pero haré el intento. Los sucesos ocurren bastante rápido, en que Max Rhode un escritor que alcanza el éxito con su primera novela publicada “El Colegio del horror”, no vuelve a saborear nuevamente el interés de los lectores. Casado y con una hija, llamada Jola (10 años). El matrimonio hace algún tiempo está quebrado, pero deciden intentarlo por el bienestar de la niña. Jola está tutelada (protegida) por Max y Kim (esposa), ya que las circunstancias de la vida, no permiti2eron a la pareja ser padres biológicamente, decidiendo acoger a la pequeña que venía de una familia conflictiva. Por lo que la relación del protagonista y su hija es mucho más cercana, deseando adoptarla formalmente, pero que no ha sido posible por el constante trámite gubernamental. 

Lo anterior para contextualizar. Los sucesos se ponen interesantes para el lector y trágicos para los personajes, cuando Max recibe una llamada de un hombre que se encuentra hospitalizado que le dice que tenga cuidado con “Joshua”, que “él lo sabe todo”, “que no cometas errores”, aquello desconcierta al protagonista, pero no le da mucha importancia. Hasta que un día al llegar a casa recibe la visita de la trabajadora social que lleva el caso, la que indica que Jola debe volver con sus padres biológicos, ya que un psiquiatra por medio de un informe destaca que están capacitados de recibirla. Lo que desconcierta a Max, diciendo que es bastante extraño que de un momento a otro cambien de parecer. Por lo que decide arrancar con la niña, sufriendo un grave accidente automovilístico, del cual despierta en un hospital, estando su esposa, policía y amigo-abogado queriendo saber qué ocurrió. Él les comenta sobre el suceso, pero para su sorpresa, no se recogió a Max en la carretera cercano al auto volcado, sino en un basural sin rastros de la hija. Siendo ellos quienes piden explicaciones sobre el paradero de Jola. Resultando Max el principal sospechoso de la desaparición, sin estar al tanto de que hay algo más grande detrás (personas), que siguen sus pasos, que harán que la búsqueda sea casi imposible. Debido a esto decide recurrir a su hermano que pasó largos años en un instituto psiquiátrico, -no daré detalles al respecto, para que ustedes lo descubran- con el fin de conocer la verdad y saber qué sucedió con la niña.

El libro lo leí en dos días, es muy rápido, desde el primer momento uno es partícipe del mundo que nos presenta el autor. Tiene muchos giros la historia, lo que hace que estemos pendientes a los detalles y aborda temáticas contingentes que no son abordadas con regularidad (no las mencionaré, sino el final estaría un poco claro). Lo que no me gustó fue que existían demasiados personajes, que aparecían de la nada, lo que provocaba que se desviara un poco la atención de lo central. 

Al leerlo me acordé de Búsqueda Implacable. Lo recomiendo, es una buena lectura para el verano, sí les gusta el suspenso y acción, le deben dar una oportunidad. 

 por matías