En Pantalla: Sicario: Día del Soldado



Título Original: Sicario: Day of the Soldado
Dirección: Stefano Sollima
Guion: Taylor Sheridan:
Elenco: Benicio del Toro, Josh Brolin, Isabela Moner, Jeffrey Donovan, Catherine Keener
Duración: 122 Minutos
 
"Sicario" fue una película que mostró la lucha contra los carteles mexicanos dejando claro que hay pocas diferencias entre los "buenos" y los "malos", aunque, dejando claro que la contienda está llena de brutalidades por ambos lados. Ahora, 3 años después, volvemos a este mundo en una secuela todavía más brutal.

Tras un ataque terrorista que deja 15 muertos, se sospecha que los carteles de la droga han comenzado a traer terroristas a la frontera entre Estados Unidos y México. Ante esto, Matt Graver es llamado para iniciar una guerra entre carteles, contando con todos los recursos que le sean necesarios. Para esto, Graver recluta nuevamente al sicario Alejandro Gillick, con quien emprenderá esta peligrosa misión.

La película tiene un inicio bastante impactante, que nos hará saber inmediatamente a lo que nos estamos enfrentando. Dicho inicio es un arma de doble filo, ya que el resto de la película crea un suspenso bastante fuerte, y puede que esto desconcierte a algunas personas, ya que esta película no es de acción pura y dura, sino que se trata de un thriller a toda prueba.

Si bien Kate Macer (Emily Blunt) era la protagonista de la primera película, el protagonismo se lo llevaba Alejandro Gillick, el abogado que perdió a toda su familia y que buscaba venganza como sicario. En este aspecto, centrar la película más en este personaje fue un acierto total, y veremos que su personaje es desarrollado de forma mucho más profunda, y sabremos mucho más sobre él.

El resto de las actuaciones es impecable, con Josh Brolin continuando su gran año tras "Avengers: Infinity War" y "Deadpool 2", y mostrando que Graver es alguien realmente despiadado; Isabela Moner también brilla en su papel como Isabela Reyes; sin embargo, debo decir que me habría gustado ver más de Jeffrey Donovan como Steve Forsing, que fue una presencia que se sintió bastante en la historia, aunque solo tubo un par de líneas de diálogo durante la historia.

Creo que lo más importante aquí es ver que hay un claro intento por demostrar que no hay un intento por volver a hacer la primera película, ya que Taylor Sheridan, que se está convirtiendo en uno de los mejores guionistas de la industria, ha desarrollado los personajes que ya conocimos antes, y los lleva a nuevas alturas. Quiero destacar una escena en particular (tratando de no hacer spoilers), que es cuando Gillick se encuentra con un hombre sordomudo: creo que es una de las mejores que he visto en mucho tiempo, y logra maravillas para desarrollar a su personaje en muy poco tiempo.

También, Stefano Sollima, director italiano que hace su debut en Estados Unidos, Dariusz Wolski, cinematógrafo, y Hildur Guoðnadóttir, compositor que reemplaza al fallecido Jóhann Jóhannsson, han creado una película que se siente más a escala humana que la primera parte, demostrándonos que el mundo en el que habitan es brutal (como ya lo vimos antes), pero ellos no son muy diferentes, y se nota en las escenas de acción, que son tan breves como brutales.

Una película que se distingue lo su predecesora lo suficiente para demostrar que, más que una buena secuela, es una buena película por propio mérito.

Escrito por Mario . 
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